La conexión entre salud bucodental y enfermedades sistémicas
Cuidar la salud de la boca no es solo una cuestión estética: está directamente relacionada con enfermedades como la diabetes, hipertensión, problemas cardíacos e incluso lesiones musculares.
Durante años, la salud bucodental ha sido considerada un tema menor o exclusivamente estético. Sin embargo, cada vez más estudios demuestran que la boca es un órgano clave en nuestro bienestar general. Su función en la alimentación, su abundante irrigación sanguínea y su conexión con el resto del cuerpo hacen que cualquier infección o problema bucal pueda tener consecuencias mucho más allá de los dientes.
Una boca con infecciones activas, como caries o enfermedad periodontal, puede ser una puerta de entrada para bacterias que viajan a otros órganos, exacerbando condiciones como la diabetes o la hipertensión. Afortunadamente, cuando estas enfermedades sistémicas están bajo control, también se reducen significativamente los efectos adversos que pueden manifestarse en la cavidad oral.
Por ejemplo, se ha identificado que las caries durante el embarazo podrían aumentar el riesgo de parto prematuro o de bajo peso al nacer. En el ámbito deportivo, muchos atletas con lesiones recurrentes son derivados al odontólogo, ya que ciertas bacterias bucales han demostrado tener un impacto negativo en la recuperación muscular y aumentar el riesgo de desgarros.
La prevención comienza desde temprano: lo ideal es que la primera visita al dentista se realice a los seis meses de vida. Además, se recomienda realizar al menos una revisión anual y mantener una dieta baja en carbohidratos y azúcares, que son los principales responsables del deterioro dental.
La salud bucodental no es un tema menor ni independiente del resto del cuerpo. Es una parte esencial del sistema que sostiene nuestra calidad de vida. Una boca sana puede ser un factor protector frente a múltiples enfermedades, mientras que su descuido puede actuar como desencadenante o agravante de problemas mayores. Cuidarla es, sin duda, cuidar de nuestra salud en general.