Por AFP Agencia |13 de julio de 2025, 9:51 AM

Tras un mes de competencia, el Mundial de Clubes consagrará por fin a un campeón. El Paris Saint-Germain y el Chelsea zanjan este domingo a las afueras de Nueva York la disputa por el trono del rey del mundo.

Los hombres de Luis Enrique, autores de un fútbol ofensivo y vertiginoso, parten favoritos para quedarse con el primer título del renovado torneo de la FIFA, que ahora cuenta con 32 participantes y reparte mil millones de dólares en premios.

El MetLife Stadium a las 15H00 locales (1 p. m. de Costa Rica) en East Rutherford, con capacidad para 82.500 espectadores, será el palco del duelo entre los vencedores de la Liga de Campeones de Europa y de la Conference League, al que asistirá el presidente estadounidense, Donald Trump.

El PSG llega con la camiseta inflada y el título, otorgado por sus propios rivales, de "mejor equipo del mundo", tras ganar cuatro torneos en la temporada más gloriosa de su historia con un fútbol ofensivo, de presión e intensidad fueras de serie.

Además de empotrar en sus vitrinas su primera Orejona, conquistada tras atropellar 5-0 al Inter de Milán el 31 de mayo, Les Parisiens se llevaron todo en Francia: Liga, Copa y Supercopa. Y cuentan entre sus filas con un firme candidato al Balón de Oro, Ousmane Dembélé.

"Llegamos con muy buenas sensaciones. La temporada ha sido fantástica y para nosotros es importante acabar esta temporada histórica de la mejor manera posible", dijo el técnico español el viernes en rueda de prensa.

Llamados a la calma.

Sería inesperado si la corona mundial no se la ponen los parisinos, pero el Mundial de Clubes ha sido una caja de sorpresas en la que David varias veces venció a Goliat.

El gigante francés, dueño de un mediocampo con sincronización de reloj suizo, inclusive experimentó estos imprevistos al caer (1-0) en la ronda de grupos ante Botafogo en el choque entre monarcas de Europa y Sudamérica.

Pero alzó cabeza y mostró su cara más impiadosa en la fase eliminatoria, donde despachó al Inter Miami de Lionel Messi (4-0), al Bayern de Múnich de Harry Kane (2-0) y al Real Madrid de Kylian Mbappé (4-0).

"Es una trampa hablar de juegos anteriores. Cada partido tiene su propia historia", matizó el capitán del PSG, Marquinhos.

Luis Enrique y sus pupilos son conscientes de su nivel superlativo, pero han hecho llamados a la calma debido a las dificultades que Chelsea probablemente les generará en el estadio que también albergará la final del Mundial de selecciones de 2026.

Verdugos del Benfica (4-1), Palmeiras (2-1) y Fluminense (4-1) en las rondas mata a mata, los Blues de Enzo Maresca pretenden regresar a la primera línea del balompié mundial con una plantilla muy joven, la segunda más novel del certamen con una media de edad de 25,1 años.

El entrenador italiano los guió a la cuarta posición de la Premier League y a su primer título desde 2021, la Conference League, que de paso los convirtió en el primer equipo en ganar todas las competiciones internacionales de clubes de Europa.

Show y fútbol.

Aunque reconocen el favoritismo y la superioridad del rival, Maresca y compañía defienden sus armas para pelear por su segunda estrella mundial, tras la conquistada en la edición de 2021, cuando en el torneo participaban apenas siete escuadras.

"Sabemos con el equipo que nos enfrentamos, pero confiamos en nuestras armas", dijo el mediocampista Enzo Fernández.

El campeón del mundo argentino advirtió del peligro para los jugadores de disputar los partidos bajo altas temperaturas, una problemática recurrente a lo largo del torneo junto al cansancio de los equipos por la agitada temporada en Europa.

Pero el Mundial de Clubes, con críticas o sin ellas, parece haber llegado para quedarse y los millonarios premios -el campeón volverá a casa con un cheque de 125 millones de dólares- parecen ser la carta de Gianni Infantino para calmar las aguas.

"La edad de oro del fútbol de clubes ha comenzado. Podemos decir con certeza que este Mundial de Clubes ha sido un gran éxito (...) Ya es la competición de clubes más exitosa del mundo", dijo el jefe de la FIFA el sábado a periodistas.

En un esfuerzo más para seducir a la audiencia estadounidense, un mercado que todavía no se rinde ante los encantos del 'soccer', la final tendrá espectáculos musicales antes del pitazo inicial y en el entretiempo, con la participación de artistas como Robbie Williams, Laura Pausini y J Balvin.



TelegramTeleticacom