Decenas de fieles participaron de la Salve a María Auxiliadora
La celebración tiene más de 100 años de historia en nuestro país.
A la 1:41 a. m., con velas encendidas, banderas ondeando y un fervor que se sentía en el ambiente, decenas de fieles participaron en la tradicional procesión en honor a María Auxiliadora, considerada la madre de todos los cristianos.
Esta celebración, que se ha mantenido viva por más de un siglo, reúne a generaciones enteras en torno a una figura que simboliza maternidad, guía y consuelo espiritual.
Este año, el lema "Con María Auxiliadora, misioneros de esperanza" cobró un significado aún más profundo al coincidir con el centenario de la casa salesiana de la ciudad. Bajo la protección de San Miguel Arcángel, patrono de esta comunidad desde sus inicios, se conmemoró un legado de fe y servicio que ha perdurado a lo largo del tiempo.
Uno de los aspectos más conmovedores de la jornada fue la presencia de familias que, por cuarta generación, han crecido y vivido bajo el carisma salesiano. Hijos, nietos y bisnietos continúan hoy el camino trazado por Don Bosco, demostrando cómo esta obra educativa y espiritual se mantiene viva a lo largo de los años.
Más que una festividad religiosa, esta procesión se vivió como un acto de amor colectivo, una historia compartida que se renueva cada mes de mayo. Este 2025, bajo el amparo de María Auxiliadora, la celebración prometió ser más luminosa y sentida que nunca.
