Con la frente en alto: Puntarenas firmó un semestre en el que pasó del sótano a lo más alto
Los porteños buscan, desde ya, que el éxito del Clausura 2025 pase al próximo campeonato
“Es difícil encontrarse un escenario más complicado. Iniciamos con muchísimas dudas de parte de la afición y con una estructura totalmente renovada”, explicó el técnico de Puntarenas, César Alpízar sobre cómo inició su labor al frente de los porteños.
Los naranjas iniciaron el semestre en lo más profundo de la tabla, pero su buen juego los levó a las semifinales, convirtiéndose en el equipo sorpresa del campeonato.
Las dudas eran justificadas, todas las miradas se posaban sobre los chuchequeros y los ponían en el Ascenso, pero al final fue Santa Ana quien perdió la categoría.
En el primer juego del año, Puntarenas empató con Herediano (1-1), sumando cuatro juegos en fila sin ganar, remontándose al 2024.
Lo que se veía como un paso en la dirección correcta se fue convirtiendo en un escape del farolillo. Los de Alpizar sumaron 14 partidos en fila sin perder.
Cuando Cartaginés les arrebató el invicto, ya era el final del mes de marzo, y los tiburones peleaban por la cima, dejando atrás el fantasma de la Segunda División.
El cierre de la fase regular no fue tan brillante, pero más que suficiente para ser terceros y caer luego, en semifinales antes Alajuelense.
A todo esto, hay que sumar el segundo lugar en el Torneo de Copa.
“Hay que rescatar labor que hicimos durante todo el torneo. Para algunos es impensable lo que logramos”, concluyó Alpizar.
