“Queríamos que los niños amaran esta historia”, afirma el director de “El rey de reyes”
Jay Seong-ho Jang y Dennis Cho, desde Corea, compartieron en entrevista exclusiva con revista #SABANA, cómo lograron convertir uno de los relatos más sagrados en una animación llena de emoción, mensaje y profundidad espiritual.
Por Joaquín Alvarado Gutiérrez / vamosalcine2025.
En una entrevista exclusiva con revista SABANA, los cineastas coreanos Seong-ho Jang conocido como Jay, y el productor Dennis Cho, creadores de la película animada El rey de reyes de Angel Studios, conversaron con entusiasmo, calidez y pasión desde sus oficinas en Corea sobre esta producción que busca emocionar al mundo entero con la historia más grande jamás contada: la vida de Jesús.
Una historia contada como si Charles Dickens la escribiera
Jang, el director, nos compartió que desde niño fue un lector ávido de las obras de Charles Dickens, y fue precisamente ese amor por las historias profundas y humanas lo que lo inspiró a preguntarse: “¿Y si Dickens hubiera escrito un libro sobre Jesús que todos los padres del mundo leyeran a sus hijos?”
Esa fue la chispa creativa que encendió el sueño de crear una película animada para toda la familia que retratara la vida de Jesús con belleza, emoción y un mensaje profundo, sin dejar de ser accesible para los más pequeños.
“No quería que mis hijos pensaran que la historia de Jesús era aburrida”, confiesa Jang entre risas, y es ahí donde nace la idea de hacer esta animación.
“Pensé: si quiero que ellos se conecten, necesito contar esta historia como algo visualmente atractivo, dinámico, emocionante… pero sin perder la esencia”.
Del guión a la emoción: un camino lleno de desafíos
Jang y Cho comenzaron a trabajar el guion hace varios años, con la misión de mantener la fidelidad al relato bíblico, pero adaptándolo con mucho tacto a un lenguaje visual infantil. Uno de los mayores retos fue, sin duda, representar momentos duros como la crucifixión de Jesús.
“Fue una de las decisiones más difíciles de toda la producción”, nos revela Jang.
“Pasé meses pensando en cómo mostrar el sufrimiento sin asustar a los niños. La solución fue enfocarnos en el sonido, no en imágenes gráficas. El efecto emocional sigue ahí, pero lo tratamos con el respeto y sensibilidad que merecía”.
Animación con alma: cómo darle vida a Jesús en pantalla
Una de las cosas que más llama la atención en El rey de reyes es la expresividad del rostro de Jesús. Tristeza, compasión, alegría… emociones complejas que usualmente vemos en actores, pero que aquí se logran a través del arte digital.
“Es mucho más difícil en animación lograr eso”, admite Jang.
“Pero queríamos que los niños sintieran el amor y la humanidad de Jesús a través de sus ojos, sus gestos, su manera de mirar”.
La calidad de la animación, los fondos llenos de color y detalle, y una banda sonora emocional hacen de esta película un verdadero trabajo de amor. Y aunque fue creada con los niños en mente, su mensaje resuena también en los adultos.
Una película que busca convertirse en un clásico global
Tanto el director como el productor comparten que su sueño es que El rey de reyes trascienda generaciones y se convierta en un clásico de la temporada de Semana Santa.
“Queremos que cada año, familias alrededor del mundo la vean juntos”, nos dice Cho. “Así como hay películas tradicionales para Navidad, queremos que esta lo sea para Pascua”.
La película fue estrenada en países como Estados Unidos, Canadá, Reino Unido y varios de Latinoamérica, incluido Costa Rica, donde ha sido recibida con entusiasmo por el público cristiano y cinéfilo en general.
Jang concluyó la entrevista con un emotivo mensaje:
“Costa Rica, muchas gracias. Les queremos decir que vayan a ver la película, que la disfruten. Esa es nuestra intención. Gracias por su apoyo”.